Rodney Reed, presentó en abril la solicitud de realizar una prueba de ADN adicional, pero fue rechazada por el más alto tribunal del Estado de Texas.
En el último año, una serie de apelaciones han concedido a los sentenciado a muerte de Texas una suspensión de la ejecución. Reed no corrió con la misma suerte.
La decisión unánime del Tribunal de Apelaciones Penales de Texas supuso un duro golpe para los esfuerzos de Reed por evitar la pena máxima.
Los jueces dijeron que no era elegible para las pruebas sobre los elementos relacionados con el asesinato de Stacey Stites en 1996, informó States Man.
A un condenado a muerte se le niega la prueba de ADN
La defensa había advertido de la posibilidad de contaminación cruzada de las pruebas de ADN utilizadas en el juicio original.
Sin embargo, los jueces dijeron que los abogados de Reed no pudieron demostrar que los resultados del ADN hubieran cambiado el resultado final de su juicio. Alegaron que las normas que permitían las pruebas estaban establecidas por la ley estatal.
El equipo de la defensa de Reed afirmó que la decisión del tribunal era una tergiversación defectuosa de la ley estatal. Los abogados alegaron que la legislatura de Texas pretendía asegurarse de que se realizaran pruebas exhaustivas de ADN y de otro tipo antes de enviar a un recluso a la ejecución.
Reed ha estado cerca de la ejecución antes. Hace dos años, estaba a 10 días de ser ejecutado cuando el tribunal de apelaciones de Texas pidió que se estudiara su solicitud de pruebas de ADN modernas.
El equipo de la defensa esperaba demostrar que Reed no mató a Stites y que el verdadero asesino fue su prometido, Jimmy Fennell. Reed afirmó que tenía una aventura con Stites, hecho que explicaba la presencia de su semen en el cuerpo de ella.
Argumentó que el descubrimiento de la aventura dio a Fennell un motivo para el asesinato. Los fiscales afirmaron que las pruebas de ADN demostraron que Reed violó a Stites poco antes de que fuera estrangulada.
El Statesman informó que la joven de 19 años fue encontrada muerta enuna carretera en el condado de Bastrop. Fue asesinada poco más de dos semanas antes de la fecha de su boda. Posteriormente, Fennell fue condenado a 10 años de prisión por la agresión sexual y el secuestro de una mujer que estaba bajo su custodia como policía de Georgetown.
En los casos de homicidio capital cuando la vida de un acusado está en juego, es vital que se consideren todas las pruebas relevantes. El acusado es inocente hasta que se demuestre su culpabilidad.
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