Austin tiene un comité de supervisión policial. Sin embargo, la negativa de la policía a seguir las recomendaciones del panel de ciudadanos pone en riesgo el experimento de 16 años.
El panel describió la actuación de la policía sobre un hombre de 25 años como un ejemplo de «lo que no se debe hacer» en una llamada de salud mental.
El Texas Observer señaló que Richard Munroe sólo quería alguien con quien hablar cuando llamó al 911 en la madrugada del 5 de julio de 2015.
El hombre ebrio de Austin describió sus problemas al despachador. Dijo que pasó un tiempo en un hospital psiquiátrico. Preguntó si la policía podía rastrear su dirección a partir de la llamada.
En más de una ocasión, dijo que no quería que aparecieran policías. El despachador le aseguró que no podía ser rastreado.
El despachador le dijo a Munroe que el procedimiento correcto era llamar al 911 si tenía un problema.
Munroe descubrió que la policía estaba frente a su puerta a los 20 minutos de la llamada. Su perro ladró. El Observer informó que se perturbó más cuando los agentes de policía comenzaron a gritarle.
Aunque el operador prometió comunicar a los agentes que fueran más despacio, un agente se abalanzó sobre Munroe y utilizó una pistola eléctrica cuando salió de la casa empuñando una pistola de aire comprimido.
Los agentes expresaron que dispararon más de 20 balas hacia la residencia. Munroe fue asesinado a tiros.
Los tres agentes que dispararon a Munroe fueron absueltos posteriormente en un juicio con gran jurado. Los agentes ni siquiera fueron sancionados.
La investigación de asuntos internos del Departamento de Policía de Austin determinó que los agentes no violaron las políticas del departamento.
Ese habría sido el final de la historia si Austin no contara con un Panel de Revisión Ciudadana que Austin había creado 16 años antes para una mirada independiente de tales incidentes.
El panel debe identificar los problemas y otorgar recomendaciones al departamento para que pueda poner en marcha y prevenir futuras tragedias como la de Richard Munroe.
En relación con el caso de Munroe, el panel hizo hasta 18 recomendaciones de cambio.
Calificó el caso como «un ejemplo de lo que no se debe hacer» durante una llamada de salud mental.
El tribunal consideró que los tres agentes que dispararon a Munroe tenían una experiencia combinada de sólo 26 meses en el trabajo.
Aunque el departamento de policía trajo un helicóptero para volar por el barrio de Munroe, nunca llamó a un equipo de respuesta a la crisis ni a un agente de salud mental capacitado para tratar con personas en situación de angustia emocional.
Los policías dispararon docenas de veces hacia la casa de Munroe sin saber siquiera si había alguien más dentro.
Ninguna de las recomendaciones ha sido aplicada señaló la Coalición de Justicia Penal de Texas.
El presidente de la junta de revisión, Dominic Gonzales, expreso que la muerte de Munroe debería ser un momento de enseñanza para el departamento. En cambio, está amargamente decepcionado por la falta de acción.
El caso puede llevar a la finalización del panel de ciudadanos. El contrato debía renovarse a finales de 2017 y muchos comentaristas se mostraron consternados por la forma en que se ignoraron las recomendaciones del panel.
Nuestros abogados de defensa penal de Fort Worth están consternados por las tácticas utilizadas por algunas fuerzas policiales en Texas. Los métodos, a menudo inconstitucionales y la falta de respuesta proporcional sesgan una investigación penal. Contáctenos para una consulta gratuita.
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