Lo primero y más importante que deben conocer es el nivel exacto de infracción que se les imputa y cuál será el posible rango de la pena o condena. Por ejemplo, para un delito menor de Clase A, la pena posible es de hasta un año de cárcel y una multa de hasta $4000. Por lo tanto, lo primero que el cliente debe entender es el nombre de la infracción, el nivel de la misma y el posible rango de la pena. Posterior a ello, lo siguiente que deben comprender es cuál es la probabilidad de condena. ¿Tenemos buenas posibilidades de ganar? ¿Existe una alta posibilidad de que el jurado declare al cliente como no culpable? Si no hay una buena posibilidad, ¿Cuál es la pena probable que entraría en juego si fuese declarado culpable? Esos son los inconvenientes sobre los que asesoramos cuidadosamente al cliente, para que pueda tomar una decisión inteligente sobre si aceptar un acuerdo de culpabilidad o atravesar un juicio.
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