Texas tiene una ley de porte de armas de fuego abierto desde hace más de un año. La propuesta fue controvertida y representó un enfoque más liberal de las armas de fuego que el visto en muchos estados.
Las opiniones están polarizadas sobre si ha exacerbado o reducido la delincuencia con armas de fuego.
Recientemente, la revista Harvard Law and Policy Review ha concluido que portar armas a la vista no es la solución al aumento de los delitos con armas de fuego.
«No hay pruebas concluyentes sobre que la ampliación del acceso a las armas de fuego tenga algún efecto positivo en los índices de delincuencia o en los incidentes de violencia», afirma el estudio.
El artículo discrepa de las afirmaciones de los defensores de las armas de fuego que un mayor índice de posesión de armas reduce la delincuencia. Citó un estudio de los Institutos Nacionales de la Salud de 2013, en el que se analizaban los índices de violencia relacionada con las armas de fuego a lo largo de tres décadas y se identificaba una fuerte correlación entre la posesión de armas y los incidentes de violencia, en particular los homicidios.
Sin embargo, estos estudios se referían a las armas ocultas y no al porte abierto.
Recientemente, el vicegobernador de Texas, Dan Patrick, afirmó que los estados en los que la gente lleva más armas tienen menos delitos. Expresó:
«En todos los lugares donde hay más ciudadanos que portan armas, la delincuencia es menor. Hay un estudio que muestra que donde los estados tienen la portación abierta o la portación oculta, pero particularmente la portación abierta, el crimen se reduce en un 25 por ciento. Los asesinatos disminuyen. Que los ciudadanos respetuosos de la ley tengan armas es algo bueno».
Un artículo de Politifact destacaba las conclusiones contradictorias de los estudios sobre la cuestión de si más posesión de armas equivale a menos delincuencia.
Se refería a un estudio realizado por investigadores de la Universidad A&M de Texas que examinaron los datos sobre delincuencia en Texas, Florida, Michigan y Pensilvania desde 1998. Estos fueron los únicos cuatro estados que contaban con al menos 10 años de estadísticas tras la promulgación de la legislación sobre el porte oculto.
En todos los estados aumentó el número de permisos de porte oculto como resultado del cambio. Sin embargo, las tendencias varían de un estado a otro. Los robos y las violaciones se redujeron en los cuatro estados entre 1998 y 2010, mientras que los asesinatos disminuyeron en Michigan y Texas. Sin embargo, los robos, las agresiones con agravantes y los hurtos aumentaron durante ese tiempo en Michigan y Pensilvania, mientras que los homicidios aumentaron en Florida y Pensilvania.
A pesar de incidentes de gran repercusión, como la muerte de cinco policías a manos de un francotirador en Dallas este verano, hay pocas pruebas sobre que la ley de portación abierta de Texas haya impulsado los delitos con armas de fuego.
Sin embargo, existe cierta preocupación por el hecho de que diferentes jurisdicciones traten la ley de portación abierta de forma incoherente y acusen a las personas de delitos cuando actúan de acuerdo con la ley. Ciertamente hay algunas áreas grises en la ley, como por ejemplo si los agentes de policía pueden pedir a las personas que llevan sus armas abiertamente que muestren sus permisos.
Si usted está enfrentando cargos relacionados con el porte de armas de fuego, debe ponerse en contacto con un abogado experimentado del Condado de Tarrant. Llámenos al (682) 204-4066
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