No solemos asociar a Texas con una pausa en las ejecuciones. Pero eso es exactamente lo que ha sucedido en los últimos meses, después que el Tribunal de Apelación de lo Penal paralizara cuatro en el espacio de otras tantas semanas.
Un artículo del Texas Tribune publicado en septiembre señalaba que la última vez que se aplicó la pena de muerte en el Estado de la Estrella Solitaria fue cinco meses antes.
Representa la mayor brecha en las ejecuciones en Texas desde 2008. En ese momento, la preocupación por los aspectos constitucionales de la inyección letal hizo que se frenara a nivel nacional. En esta ocasión, las razones del parón son menos claras.
Aunque se siguen fijando las fechas de ejecución de los condenados a muerte, los jueces y los tribunales del estado han detenido o reprogramado las ejecuciones. Dos jueces han aludido a nuevas tácticas de los abogados defensores de Texas.
Los que se oponen a la pena máxima esperan que la pausa represente un cambio de actitud más significativo, pero puede ser demasiado pronto para asegurarlo.
Texas ha ejecutado a seis condenados a muerte hasta septiembre. Otras 13 sentencias de muerte fueron detenidas o retrasadas. El Tribunal de Apelaciones Penales de Texas ha paralizado seis de ellos, cuatro en otras tantas semanas.
Entre las personas cuyas ejecuciones fueron suspendidas se encontraba Rolando Ruiz, de 44 años. Fue declarado culpable y condenado a muerte por el asesinato por encargo de Theresa Rodríguez.
La ejecución de Ruiz se suspendió a raíz de las alegaciones sobre la idoneidad de su representación en el juicio original. Ruiz también argumenta que es inconstitucional ser ejecutado más de dos décadas después de haber sido condenado en 1992.
Se plantearon cuestiones más fundamentales sobre la suspensión de la ejecución que el Tribunal Penal de Apelaciones de Texas concedió a Jeff Wood en agosto.
El caso de Wood arroja grandes interrogantes sobre la pena de muerte. Era un cómplice que ni siquiera estaba en la tienda cuando un amigo mató al dependiente. Estaba fuera en el coche. Un artículo publicado en The Intercept dice que el caso de Wood pone en duda la constitucionalidad de la pena de muerte en Texas.
En The Medlin Law Firm, defendemos a las personas que son acusadas de asesinato en Fort Worth y en otros lugares. Somos muy conscientes del carácter aleatorio de la pena de muerte. Puede leer más sobre nuestra defensa contra el asesinato aquí.
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